¿Buscas un paraíso de arena blanca y aguas cristalinas? No busques más, Formentera es el destino perfecto. Nuestra pequeña isla, en las Islas Baleares, cuenta con algunas de las playas más bonitas de toda España. Si eres amante de la playa y estás planeando tus vacaciones en Formentera, no puedes perderte estas joyas costeras. En este artículo, te presentaremos las playas más hermosas de la isla, donde podrás relajarte, disfrutar del sol y sumergirte en aguas turquesas. ¡Prepárate para una experiencia inolvidable!
- Playa de Ses Illetes: un paraíso en tierra firme
La playa de Ses Illetes es simplemente espectacular. Ubicada en una área natural protegida, en la península de Es Trucadors, esta playa destaca por su arena blanca y sus aguas poco profundas, ideales para las familias con niños. Con una longitud de 500 metros, esta playa ofrece todo lo que necesitas para un día perfecto bajo el sol. Además, cuenta con servicios y varios chiringuitos donde podrás disfrutar de una comida especial. Si buscas un lugar emblemático, te recomendamos visitar Beso Beach, uno de los locales más famosos de Formentera.Para llegar a Ses Illetes, puedes optar por el medio de transporte oficial de la isla: la bicicleta. También puedes llegar a pie o en autobús desde el puerto de La Savina. Si prefieres ir en coche o en moto, ten en cuenta que deberás pagar para entrar y poder estacionar. Recuerda explorar más allá de la zona inicial de la playa dado sus dificultades de aparcamiento, ya que encontrarás áreas menos concurridas y podrás disfrutar de la belleza del entorno natural.
- Cala en Baster: un remanso de tranquilidad
Si buscas tranquilidad y un oasis de paz, Cala en Baster es una excelente elección. Esta pequeña cala rocosa, sin arena, te brinda la oportunidad de disfrutar de vistas magníficas de la costa, con sus cuevas y embarcaderos escondidos. Para llegar a esta playa, deberás dirigirte al pueblo de Sant Ferran de ses Roques y aparcar en la parte superior de un acantilado. Cala en Baster es un rincón tranquilo, incluso en pleno verano, ideal para practicar snorkel y explorar las maravillas del mar. Recuerda llevar escarpines y tener precaución, ya que no hay servicio de socorrista ni señalización.
- Caló d’es Mort: una cala idílica en el sur de la isla
Caló d’es Mort es una pequeña joya escondida en la costa sur de Formentera. Con sus 70 metros de arena blanca y sus aguas cristalinas, esta cala ofrece un entorno idílico para aquellos que buscan tranquilidad y belleza natural. Rodeada de acantilados rocosos y con casetas de pescadores a lo largo de la costa, Caló d’es Mort te transporta a un remanso de paz lejos del bullicio turístico.Y es que, a pesar de su creciente popularidad, esta playa aún conserva su encanto intacto. Para disfrutarla en su máximo esplendor, te recomendamos visitarla temprano por la mañana o al atardecer, cuando podrás contemplar una impresionante puesta de sol sobre las aguas cristalinas. Recuerda llevar contigo comida y bebida, ya que no hay servicios disponibles en la playa.
- Es Cavall d’En Borràs: un refugio entre pinos
Es Cavall d’En Borràs, situada a un par de kilómetros de Cala Savina, es una playa encantadora rodeada de un frondoso bosque de pinos. Este refugio natural atrae, sobre todo, a aquellos que buscan relajarse y disfrutar de un pícnic junto al mar. La belleza salvaje de la playa se combina con un ambiente moderno, ya que cuenta con uno de los chiringuitos más famosos de Formentera.Alternativamente, también puedes disfrutar de la puesta de sol mientras tomas un cóctel en los cercanos clubes del puerto de La Savina. La puesta de sol con un aperitivo es un ritual mágico en Formentera y Es Cavall d’En Borràs es el lugar perfecto para vivir esta experiencia. Comparada con Ibiza, la isla ofrece una vida nocturna menos agitada pero igualmente cautivadora. Los locales de moda presentan ambientes exclusivos, alternativos o hippie-chic y ofrecen la oportunidad de disfrutar de un mojito al atardecer.
- Cala Saona: una joya en la costa oeste
Ubicada en la pintoresca costa oeste, Cala Saona te cautivará con su entorno idílico y su atmósfera relajante. Enclavada en una pequeña bahía protegida del oleaje, es el paraje perfecto para disfrutar de aguas tranquilas y cristalinas. Al poner un pie en esta playa, quedarás maravillado por la amplia gama de tonalidades azules que se despliegan ante tus ojos transportándote a destinos caribeños de ensueño. Pero la belleza de Cala Saona no se limita solo a sus aguas. El entorno natural que la rodea es igualmente cautivador. Entre las rocas, se encuentran las encantadoras casetas de pescadores, añadiendo un toque auténtico y pintoresco al paisaje. Además, la playa cuenta con varios chiringuitos donde podrás deleitarte con exquisitos platos y refrescantes bebidas mientras aguardas la llegada de un atardecer mágico.A pesar de su modesto tamaño, con aproximadamente 150 metros de longitud, es famosa por sus impresionantes atardeceres. Es el escenario perfecto para presenciar cómo el sol se sumerge en el horizonte, tiñendo el cielo de tonos dorados y creando un espectáculo visual inolvidable. Además, podrás disfrutar de una variedad de actividades, como paddle surf, kayak y esnórquel. No olvides explorar las fascinantes cuevas submarinas que se encuentran cerca, en Punta Rasa, añadiendo emoción y aventura a tu visita. Por si fuera poco, cuenta con aparcamiento gratuito para los visitantes.
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